Aprovecho que ya estoy en EEUU y vuelo a Seattle para poder ver a la
Dra. Marra en persona en vez de por Skype.
La segunda cita dura una hora y media y
vuelvo a salir con una buena impresión de mi nueva doctora. Me gusta su
determinación y el interés que muestra por mi caso particular. Me gusta que se
acuerde de mi nombre, que se acuerde de cosas que le dije en la primera cita y
que su cerebro no pare de trabajar intentando descifrar la complejidad de mi
enfermedad mientras decide el siguiente paso en mi tratamiento.
Desgraciadamente mi lucha acaba de
empezar (aunque lleve ya 15 años enferma y se haga cada vez mas dura) y es
pronto para saber si este tratamiento conseguirá ayudarme. Ella confía en que
sí, me dice que un alto porcentaje de sus pacientes recuperan su vida (un
90%). Pero no deja de repetirme
que la lucha es larga, que este año va a ser duro y que seguramente sea una
lucha de varios años. Así que tengo que seguir buscando pedazos de paciencia de
donde pueda encontrarlos y armarlos en un gran bloque del que ir tirando. Es
duro. Muy duro. Pero no me queda otra que seguir intentándolo.
La doctora parece sorprenderse de que no
haya tenido una fuerte reacción de herx al empezar el tratamiento. La verdad es
que la última semana me he sentido peor. Estoy mas cansada, el cerebro mucho
mas espeso, mala memoria, dolor de ojos, visión borrosa, sensación extraña en
la garganta y me empiezan las sensaciones de ardores en la pierna izquierda. Me
dice que seguramente este empeoramiento sea un herx pero piensa que necesito un
tratamiento mas agresivo y me propone hacer intravenoso.
Yo, después de mi experiencia a
principios de año, tengo bastante miedo a volver a hacer un tratamiento tan
agresivo. Hasta que hice intravenoso pude llevar una vida mas o menos activa, aunque
con muchas limitaciones. Pero después del intravenoso empeoré muchísimo y
todavía no me he recuperado.
Así que le pregunto a la Dra. si
considera que el intravenoso es la mejor opción o si cree que hay otras igual
de efectivas. Me dice que hay otra opción igual de fuerte que podemos intentar.
Consiste en inyecciones intramusculares de penicilina, aumentar la dosis de
doxiciclina, continuar con la misma dosis de azithromicina y añadir ciprofloxatina. Me dice que es
un tratamiento tan fuerte como la quimioterapia.
A mi me parece mucho mejor opción que el
intravenoso, al menos de momento, así que opto por ella (aunque en mi interior
sé que en algún momento tendré que volver a hacer intravenoso).
Por otro lado me enseña los resultados de
los análisis que me hice en la primera cita.
Se sorprende al ver que no tengo problemas
de coagulación en mi sangre. No sé porque estaba tan segura de que iba a tener
la sangre espesa pero yo me alegro de que por lo menos algo esté funcionando
como debe en mi cuerpo.
También me enseña los resultados de los
análisis de mis genes MTHFR y me explica que tengo mutaciones y que ¡tengo las
dos! Parece que tengo la peor combinación posible, la que mas reduce tus
capacidades de detoxificación.
Soy “compound heterocigota” lo que
significa que tengo una mutación por parte de madre y otra mutación por parte
de padre (C6667T y A1298).
Las siglas MHTFR significan
methyl-tetrahydrofolate reductasa; la encima responsable de la metilación en
cada célula de nuestro cuerpo.
Y la metilación es el proceso que tiene
lugar cuando el cuerpo transforma una sustancia en otra para detoxificarla y
que así pueda ser expulsada.
Como sabemos, la detoxificación es una
parte muy importante en el tratamiento del Lyme. Cuando tratamos esta
enfermedad matamos bacterias diariamente y el cuerpo tiene que deshacerse de
ellas para no crear una toxicidad que incrementaría los síntomas. Por esto, lo
ideal sería que las personas enfermas de Lyme tuviesen estos genes MTHFR
funcionando perfectamente y sin mutaciones.
Desgraciadamente no es mi caso.
Pero, aunque todo esto da un poco de
miedo ya que es obvio que complica todo el tratamiento, la buena noticia es
que, aunque no puedes cambiar tus genes, hay muchas cosas que puedes hacer para
ayudar a tu cuerpo en el proceso de metilación. En mi caso, la Dra. Marra ha
añadido a mi tratamiento dos cosas:
- Methyl protect (XYCOGEN) que contiene
Riboflavin, Vit B6, Folate, Vit B12 y Betaine Anhydrous.
- L-5-MTHF 5mg (designs for health) que
contiene Folate.
Hay mucha información en internet acerca
de estas mutaciones, de cómo influyen en el proceso de metilación, de cómo
están involucradas en muchas enfermedades y de lo que se puede hacer para ayudar
a paliar este déficit de funcionamiento genético.
Aquí un par de páginas interesantes:
Y aquí os dejo mi nuevo tratamiento,
bastante similar al anterior en cuanto a hierbas y suplementos pero mucho mas
agresivo en cuanto a antibióticos.
Para la forma Cyst:
- Boluoke
- NAC
Para adrenales:
- Ashwaganda
Para hongos:
- Nystatina
- Diflucan
Probioticos:
- Prescript Pro
- Saccro B
- Plantadophillus
- Pure Heart
- Theralac
Para la mutación MTHFR:
- 5-MTHF
- Methyl Protect
Otros:
- Pectasol
- CoQ10
- Magnesio Glycinate (esto me lo manda
porque el antibiótico cipro agota las reservas de magnesio)
- Vit D
- GI Care
- NT Factor
Antibióticos:
- Penicilina 1,200.000 Ud – Dos veces a la
semana
- Azythromicina 250mg – Dos veces al día
- Doxiciclina 200mg - Dos veces al día
- Ciprofloxatina 250mg – Dos veces al día
Y de momento nada mas! A seguir luchando!
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